El cambio os hará libres

Nos hemos pasado la vida aprendiendo a hacer las cosas tan bien que las hacemos con los ojos cerrados y no nos hemos dado cuenta de que, de esta manera, nos hemos vuelto ciegos.

Hemos trabajado con ahínco para que nuestro actuar diario sea metódico, que nuestros compromisos se conviertan en rutina y nuestras tareas se consoliden para hacer disponible nuestra experiencia.

Hemos aprendido a ejercer nuestra profesión, a conducir, a cocinar, a utilizar el ordenador, a enviar correos electrónicos, a rellenar formularios, a abrir archivos y nos hemos vuelto más rápidos en hacerlo porque lo hemos registrado firmemente en nuestro archivo mental. De esta manera todo parecía más fácil, menos cansado, porque requería menos gasto de energía y menos concentración y, sobre todo, ya no teníamos que ser tan cuidadosos y pensar en lo que estábamos haciendo. Gran parte de nuestra acción se ha vuelto automática y, de esta manera, nos hemos auto anestesiado.

Desafortunadamente, al igual que los músculos, también la voluntad se debilita si no se usa, de modo que hacer un cambio en nuestra vida a menudo se vuelve algo de verdad difícil, a veces casi imposible. Pregúntale a cualquiera que esté intentando hacer una dieta, dejar de fumar, cambiar su actitud o estilo de vida, buscar un nuevo trabajo, empezar a ir al gimnasio o hacer actividad física. Todo aquello que requiere un cambio de ruta en nuestra rutina parece que necesite un esfuerzo enorme por nuestra parte que muchas veces nos hace desistir. Estamos formateados en modo unidireccional, y lo que llamamos pereza asume el papel de un demonio enviado a propósito para hacernos fallar.

Si además en la familia hay alguien que no ha logrado hacer exactamente lo que a nosotros nos gustaría lograr, nuestra herencia genética también juega un papel importante contra nosotros aplastándonos, haciéndonos perder de vista nuestras metas.

El cambio es fundamental para emerger de aquellas perspectivas de futuro que no nos pertenecen y encontrar la expresión de vida que deseamos de verdad, conscientemente. No importa lo que cambies. Cambia algo cada día y una parte de ti que duerme se despertará.

Actuar un cambio es el mejor ejercicio de voluntad, conciencia y presencia que podemos poner en práctica. Se necesita conciencia para decidir un cambio y se necesita presencia y voluntad para implementarlo.

Si caminas siempre a la misma velocidad, cambia tu ritmo. Si es demasiado rápido, desacelera, si es demasiado lento, acelera. Cada uno tiene su propio ritmo y es diferente cada día. Encuentra un ritmo para tu día a día, cada día.

Si te das siempre un paseo de una hora por el parque, cambie la unidad de medida. Date una vuelta completa, si tardas 52`está bien igualmente. Puedes llegar a darte cuenta de que ese tiempo que durante tiempo te has fijado corresponde con el deber de vigilancia de tu bisabuelo en la guerra o el entrenamiento de tu padre, lo cual quier decir que no son tus binarios. Ningún binario es tuyo. Tu tienes el infinito disponible.

Si siempre cocinas lo mismo, cocina como si fuera la primera vez, tratando de percibir qué especia va bien con tus ingredientes. Crea una nueva sinfonía de sabores todos los días, que alimente tu creatividad y que se alimente de tu creatividad.

Si estás acostumbrado a hacer muchas cosas al mismo tiempo, intenta hacer solo una a la vez y saborea el significado de hacer ese gesto con la atención y presencia que es exclusivamente tuya. Si siempre has creído que solo puedes hacer una cosa a la vez, haz tres al mismo tiempo y saborea el poder de tu cerebro multifuncional, multi-creativo y multidimensional.

Si estás acostumbrado a hacer cosas por los demás, tómate un día y haz algo por ti mismo. Si la jardinería no es lo tuyo, cuida las plantas. Si eres modesto, presume. Si eres vanidoso, busca un lugar en ti que no sea ruidoso. Cepíllate los dientes con la mano izquierda. Acuéstate a las 9 pm y levántate temprano.

No importa lo que estés cambiando. Es importante que mantengas en acto la acción de cambiar, que te entrenes para salir del formateo, de la domesticación, de un posible futuro que no es el tuyo. Si descubres que estás repitiendo algo que ya pasó en tu familia genética, cámbialo inmediatamente. Significa que has entrado en la plataforma de algunos de tus familiares y… ya sabes a dónde te llevará.

Como dice la investigadora de las mecánicas mentales Fiorella Rustici: “debes mantener tu punto aquí donde vives ahora para salir de los karmas pasados. Cada uno de tus antepasados ha creado uno, y te arriesgas a saltar de uno a otro sin darte cuenta de que no estás viviendo tu vida en este tiempo sino en muchos otros tiempos paralelos”.

El cambio sirve para neutralizar las pistas en las que nos hemos deslizado sin saberlo y que no son necesariamente las nuestras. Estate siempre preparado para el cambio. Si estás dentro de una pista, un patrón o un karma no podrás aprovechar el momento. Vivirás la vida anestesiado. Al insistir en el cambio, será más fácil permanecer despierto y siempre presente.

Es el mayor ejercicio evolutivo que se puede hacer durante la vida terrenal, el cual, como consecuencia, ayuda al espíritu. El cambio contiene en sí mismo la energía de una nueva vida, precisamente porque trae novedad. Cada cambio es un renacimiento. En el cambio está la fuerza explosiva de una nueva existencia. Cambia un poco todos los días y renace un poco todos los días. Cambia y el mundo cambiará contigo.

El cambio os hará libre.

Simona Valesi
Blogger Gruppo Rebis

Articulo traducido por Alberto Allas.

Píldoras de Sabiduría

Photo by Fallon Michael on Unsplash

Pubblicato da Redazione Rebis

Membro gruppo esperti e gruppo redazione di Rebis.

Rispondi

Inserisci i tuoi dati qui sotto o clicca su un'icona per effettuare l'accesso:

Logo di WordPress.com

Stai commentando usando il tuo account WordPress.com. Chiudi sessione /  Modifica )

Foto di Facebook

Stai commentando usando il tuo account Facebook. Chiudi sessione /  Modifica )

Connessione a %s...

%d blogger hanno fatto clic su Mi Piace per questo: